Los orígenes del caramelo
El caramelo es un azúcar que ha perdido su agua de cristalización. Este efecto se consigue cocinando y el caramelo es un dulce que se puede disfrutar tanto en forma líquida, como dura o fundente. La palabra «caramelo» proviene del caramelo español o portugués, pero también del latín cannamella, que significa «caña de azúcar». Este producto está considerado como uno de los primeros dulces a base de azúcar de la historia. Su origen se remonta al siglo XIV en la región de Bretaña. Aquí se elaboraron los primeros caramelos de mantequilla salada.
La receta del caramelo
Aunque sea un producto que se encuentra en muchos postres, el caramelo no siempre es fácil de preparar e impresionará a muchos invitados cuando se prepara adecuadamente. De hecho, todo lo que tienes que hacer es verter azúcar y agua fría en una cacerola y añadir unas gotas de zumo de limón. La idea es llevar todo a ebullición sin remover. Una vez que el azúcar comienza a colorear, es hora de remover suavemente para distribuir el caramelo uniformemente. El momento crucial, más bien, es el final del proceso de cocción. En cuanto el caramelo alcance el color deseado, es aconsejable detenerlo inmediatamente sumergiendo la cubeta en un baño de hielo y agua. Dependiendo de las recetas, el caramelo puede ser más o menos líquido. Cuando es difícil, también hace posible crear magníficos decorados, ¡suficientes para sorprender a sus invitados!
Caramelo en perfumería
Sin embargo, los cocineros no son los únicos que se divierten con este ingrediente y la nota de caramelo en la perfumería es en realidad un aroma creado desde cero por los perfumistas. Se trata entonces de reproducir el olor de otras esencias. El caramelo revela así al consumidor un sabor dulce y gourmet. Su sensación es similar a la del azúcar quemado o vainilla combinada con notas lácteas. El olor a caramelo es particularmente cálido y algo balsámico. No es sin evocar la gula de la infancia y aparece principalmente en las composiciones femeninas. Sin embargo, su presencia en el departamento masculino es cada vez más frecuente. En general, el caramelo se coloca más bien en el fondo de los perfumes.
Además de su uso en el icónico Angel, el caramelo también está presente en Alien Le Gout du Parfum de Thierry Mugler, así como en Anaïs Anaïs Premier Délice de Cacharel, Body Kouros de Yves Saint-Laurent, Bonbon de Viktor & Rolf o en ambos CK One Shock Street, para hombres y mujeres, de Calvin Klein.